Los Quattro Canti es uno de los lugares más espectaculares y populares de Palermo. Los cuatro edificios que delimitan la plaza se construyeron entre 1608 y 1620, mientras que las esculturas y elementos decorativos se terminaron en 1663. Piazza Vigliena, uno de los muchos nombres con los que también se conoce a los Quattro Canti, es el punto de partida ideal para recorrer la ciudad de Palermo.
Historia de los Quattro Canti de Palermo
Los orígenes de los Quattro Canti se remontan a 1600, cuando el Senado de Palermo decidió crear una nueva calle, Via Maqueda, que se cruzara con la actual Via Vittorio Emanuele y dividiera Palermo “en cuatro partes nobles”. En la intersección de estas dos calles se formó la Piazza Vigliena. En 1608 se decidió unificar arquitectónicamente los cuatro edificios que la bordeaban. El Senado encargó el proyecto al arquitecto florentino Giulio Lasso, cuyo diseño se inspiró probablemente en la Piazza delle Quattro Fontane de Roma. En 1615, a la muerte de Giulio Lasso, Mariano Smiriglio se hizo cargo de la supervisión de las obras, modificando parcialmente el diseño de su predecesor. La arquitectura de los palacios se completó en 1620, mientras que las esculturas y los elementos decorativos se terminaron en 1663.
Curiosidad: La fiesta más importante de Palermo es sin duda la de Santa Rosalía. La noche del 14 de julio, la estatua de la santa es llevada en procesión desde la Catedral hasta el mar. Una de las paradas más significativas es en los Quattro Canti, donde el alcalde de la ciudad deposita flores a los pies de la estatua de la Santa gritando: “¡Viva Palermo y Santa Rosalía!”.
Arquitectura y obras de arte en Piazza Vigliena
Las fachadas de los cuatro edificios que componen los Quattro Canti de Palermo tienen tres niveles diferentes. El primero es de estilo dórico y contiene alegorías de las estaciones, representadas por los dioses romanos Eolo, Venus, Ceres y Baco. En el siguiente nivel hay estatuas jónicas de cuatro reyes. El plan inicial era que fueran modeladas en bronce por Scipione Li Volsi. Sin embargo, el escultor sólo realizó la de Carlos V, que posteriormente se trasladó a la plaza de Bolonia, y la de Felipe IV, que fue destruida. Las estatuas actuales son de mármol y fueron esculpidas entre 1661 y 1663 por Carlo D’Aprile. Los soberanos representados son Carlos V, Felipe II, Felipe III y Felipe IV. En el nivel superior, hay estatuas de los cuatro santos patronos de los respectivos distritos: Santa Oliva, Santa Cristina, Santa Ágata y Santa Ninfa.
Curiosità: la Piazza Vigliena, junto con el Palazzo Abatellis, fue una de las principales localizaciones utilizadas por el director Wim Wenders en su película “Palermo Shooting”.
Quattro Canti, Piazza Vigliena, Ottangolo y Teatro del Sole: origen de los nombres
Este rincón tan especial de Palermo recibe varios nombres: Quattro Canti, Piazza Vigliena, Ottangolo y Teatro del Sole. El nombre oficial es Piazza Vigliena. La razón es sencilla: el virrey español, Don Juan Fernández Pacheco de Villena y Ascalón, encargó su construcción. El nombre de “Ottangolo”, que aparece a menudo en las fuentes históricas, proviene de la forma de la plaza que, vista desde arriba, es muy similar a un octógono, aunque con los bordes redondeados. El hecho de que al menos uno de los fondos arquitectónicos esté iluminado por el sol durante todo el día dio lugar al sobrenombre de Teatro del Sole (Teatro del Sol). Sin embargo, el nombre que todo el mundo utiliza en Palermo para referirse a este lugar es “Quattro Canti” (Cuatro Esquinas). Cuando se creó la plaza, se establecieron cuatro distritos o “mandamenti” de Palermo, cada uno con el nombre del edificio más importante de la zona. Así, el antiguo barrio de la Kalsa se convirtió en el “Mandamento Tribunali”, la Albergheria en el “Mandamento Palazzo Reale”, el Capo en el “Mandamento Monte di Pietà” y la logia en el “Mandamento Castellammare”.
Curiosidad: los Quattro Canti eran también la zona utilizada para celebraciones públicas y ejecuciones. Hay un viejo dicho en Palermo: “feste e forche a Piazza Villenalan” (fiestas y horcas en la plaza Villenalan). Por este motivo, a veces también se llama a la plaza Vigliena “Teatro de la ciudad”.
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